Harom Galamb: una joven comunidad en la región húngara de Rumanía

Visita de Sonja Zausch en junio de 2025

Hace seis años, Zsuzsa Filipov-Soó regresó de Escocia con su familia. Siempre supo que sus años de aprendizaje en Camphill Escocia servirían para establecer este impulso de vida comunitaria en zonas rurales con personas con necesidades asistenciales en Rumanía.
Mucha gente recuerda la época posterior a la caída del comunismo en 1989, cuando la prensa occidental mostró las condiciones de los niños rumanos en los orfanatos: condiciones espantosas. Y sigue habiendo grandes retos en este país, que ahora es miembro de la UE, con muchos grupos étnicos conviviendo y inestabilidades financieras, económicas y políticas.

¡Harom Galamb ha dado un gran paso adelante! La comunidad, que actualmente es un centro de día con 12 personas con necesidades de asistencia, cuatro empleados y un voluntario de España, ha recibido su licencia estatal y es inspeccionada mensualmente por la autoridad supervisora: ¡la iniciativa es muy apreciada! El trabajo se desarrolla temporalmente en la llamada «Casa Kantor“ en el pueblo, cedida por la comunidad eclesiástica reformada.
Zsuzsa ha conseguido crear una gran red en torno al centro de día con iniciativas sociales, así como con el alcalde, la escuela primaria local y la gente del pueblo: ¡cada paseo con el grupo por el pueblo después de las comidas es un acontecimiento feliz con multitud de pequeños encuentros inclusivos!

Con el apoyo de una red en Escocia y otras fundaciones en Alemania, se ha renovado una casita azul muy antigua en el lugar actual y se dará vida a un nuevo edificio con 30 clientes a partir del próximo verano. ¡Será una fiesta en un pueblo de 300 habitantes!

Durante la visita de Sonja Zausch, se celebró en la sala comunitaria un taller sobre los Doce Sentidos según Rudolf Steiner, al que asistieron 35 colegas de los alrededores – incluida la mujer de la autoridad supervisora (¡!) y otro personal administrativo de la comunidad – ¡la gente es curiosa y muestra un gran aprecio por el trabajo de Harom Galamb, que es valioso en términos de humanidad, artesanía y estética!
También hubo algunas sesiones de euritmia con Sonja y todas las personas del centro de día en el pabellón de deportes local.
Sonja pudo ofrecer un taller de euritmia y los 12 sentidos para profesores y padres de la cercana Escuela Waldorf (con 8 clases en Odorhellen).
Los presentes se mostraron muy agradecidos por haber podido experimentar métodos prácticos y cotidianos de la pedagogía Waldorf combinados con la pedagogía curativa.

Miramos al futuro de esta organización con sus maravillosos empleados y les deseamos todo lo mejor.

Fotos: privadas