Una carta sobre la situación en el mundo
Para la inauguración de la conferencia internacional el 2 de octubre de 2024
por Srulik Sivan, Israel
Estimados colegas
¿Tienes tiempo?
Le pregunté a nuestro cuidador en el kibbutz.
No, dice.
Le pregunté y su respuesta duró 25 minutos.
Al final dijo, ahora has aprendido a reparar algo.
Le contesté que sí, y que ha aprendido que siempre tiene tiempo.
¿Qué es realmente el tiempo?
Eso es el ser humano. – ¿No es así? Su calor, su espíritu, su alma, su cuerpo.
Tú te tomas tu tiempo, y yo me tomo mi tiempo.
Tiempo para mi humanidad, para ti, para los demás.
¿Y Guerra? Guerra, Charb, Michama, Guerra …
¿Qué es la guerra?
La gente le dedica tiempo. Entonces debe ser importante, ¿no?
Especialmente en la guerra, la gente no se toma tiempo para sí misma, no conecta con su humanidad, con otras personas. Se separan…
¿Qué tiene eso que ver con la música?
Porque sé lo que se siente cuando caen bombas en tu barrio: ¡hay un gran BOOM!
No es de esperar, no crece como un crescendo en la música, como en Mozart o Beethoven.
No, es repentino e inesperado, extendiendo el miedo – BOOM. En medio de la noche, en el desayuno, en la ducha.
La gente está herida, mental y físicamente.
Las personas dejan su tiempo en la tierra porque mueren. Su humanidad vive en nuestro tiempo, en nuestra humanidad.
Esta resonancia herida vive en nosotros, y de ellos surge el grito – ¡BASTA YA!
Toda la gente en las zonas de guerra grita ¡ALTO!
ESCUCHARSE los unos a los otros.
Escucha según tu tiempo, según tu humanidad – escuchar requiere estar alerta, como en el cuento de los hermanos Grimm «El pequeño burro», donde el segundo rey dice: «… se quedó despierto toda la noche y escuchó».
Alerta, toda la persona está implicada, activa con cuerpo, alma y espíritu.
Y al final del cuento dice «… dijo el joven. Me quedaré contigo».
Esa es mi petición, y creo que también la de todos los habitantes de Gaza, Líbano, Ucrania, Israel, Rusia, Palestina y otras zonas en guerra.
Quédate con nosotros, por favor.
Quédate con nosotros con tu tiempo para ser humano.
Silencio
«Un impulso esencial en el desarrollo de la humanidad en la era del alma consciente debe ser el crecimiento del interés de persona a persona». Rudolf Steiner
por Srulik Sivan, Harduf, Israel